Rezar mejor, paso a paso

¿Alguna vez llegaste al final del rezo y te diste cuenta de que te pasaste todo el tiempo pensando en las noticias o en la lista de tareas que tienes que hacer?

5 Tiempo de lectura

Dennis Rosen

Posteado en 05.09.21

El núcleo del rezo diario consiste en las 19 bendiciones del Shemone Esrei o Amida. ¿Alguna vez llegaste al final del rezo y te diste cuenta de que te pasaste todo el tiempo pensando en las noticias o en la lista de tareas que tienes que hacer? ¿Alguna vez has tenido esa sensación de haberte perdido todas o la mayoría de las plegarias debido a tantas distracciones que tienes? Pues bien – no estás solo: yo también he pasado por eso, y me imagino que muchos más también…

 

Me gustaría compartir contigo algunas sugerencias que he aprendido de libros, CDs y clases y que estoy tratando de implementar.

 

Sabrás que estás ante Alguien que te ama y que tiene un poder ilimitado

 

Rabi Najman enseña que cuando empezamos a rezar debemos tener en cuenta que Hashem creó el mundo en Su compasión para mostrar Su compasión. Él nos ama a cada uno de nosotros como a un hijo único.

 

 

Él desea oír nuestras plegarias y nos escucha atentamente. Si lo considera apropiado, Él puede cambiar cualquier situación por completo y traernos la salvación que necesitamos en un abrir y cerrar de ojos.

 

 

 

Haz una pausa antes de comenzar cada bendición y piensa en lo que vas a pedir

 

 

El Jafetz Jaim nos insta a hacer una pausa antes de cada bendición y pensar en lo que vamos a pedir y por qué es tan importante. Esto nos ayudará a calmarnos y a concentrar nuestras energías intelectuales y emocionales en cada petición.

 

 

Piensa antes de hablar

 

 

El Rambán dice que debemos reflexionar sobre cada palabra antes de que salga de la boca. Cuando piensas en cada palabra por adelantado, esa palabra pasa a ser tuya. No te limitas a recitar los pensamientos de otra persona. Tus alabanzas se convierten en expresiones sinceras de amor y gratitud.  Tus peticiones se convierten en apasionados llamamientos a la asistencia y guía Divinas.

 

A menos que pensemos en lo que estamos diciendo y a Quién nos estamos dirigiendo, muchos de nosotros podemos pasar toda nuestra vida diciendo bendiciones y rezando tres veces al día y rara vez pensando en Hashem.

 

 

 

Hacer una pausa antes de concluir cada bendición

 

 

 

Desgraciadamente, incluso con las mejores intenciones, la mente puede divagar durante la recitación de cada bendición. Por lo tanto, es buena idea hacer una pausa de nuevo antes de la última frase de cada bendición – una vez más pensar en lo que estás a punto de pedir y lo maravilloso que sería que se cumpliera la petición.

 

 

 

¡No dejes que te domine la Mala Inclinación!

 

 

El Rabino Shalom Arush escribe en su libro “En los Campos del Bosque” que la Mala Inclinación sabe que la plegaria conduce a la redención y, en consecuencia, se esfuerza mucho para distraernos y desmoralizarnos en este ámbito. El autor nos dice que tenemos que conocer al enemigo: "Ahora hemos descubierto a la Mala Inclinación con las manos en la masa; es ella la que se está infiltrando en nuestro corazón y nuestro cerebro tratando de impedir que hablemos con Hashem".

 

 

 

El Rabino Arush trae una parábola del Jafetz Jaim sobre una señora que vendía manzanas en una esquina. Un grupo de jóvenes maleducados se acercó, volcó la cesta y empezó a huir con muchas de sus manzanas. Desesperada, la mujer se puso a llorar. Un sabio transeúnte le aconsejó que dejara de lamentarse y recogiera todas las manzanas que pudiera salvar.

 

 

 

Rav Arush afirma que rezar palabra por palabra es similar a una batalla de arrebatos: la Mala Inclinación se apodera de varias palabras, y entonces la persona que reza vence a la Mala Inclinación y arrebata algunas palabras. Cuanto más fuerte uno se ponga, más palabras le arrebatará a la Mala Inclinación.

 

 

 

Utiliza el poder de la canción

 

 

 

Utiliza alguna de tus melodías favoritas y de vez en cuando, canta los rezos, en vez de decirlos. Haz el intento. Verás que esto añade una enorme intención, concentración y entusiasmo a tus rezos.

 

 

 

Desacelera, ¡estás yendo demasiado rápido!

 

 

 

El Rabino Arush dice que cada día debemos tomarnos nuestro tiempo y rezar al menos una de las tres plegarias de la Amidá de manera lenta, con sinceridad y devota concentración.

 

 

 

"Imagina que te llevan al interior del tesoro real. El Rey te dice que puedes recoger todos los tesoros que quieras. Sin embargo, solamente tomas una o dos gemas y sales corriendo.

 

 

 

Hashem quiere darnos todo, y sin embargo murmuramos nuestras plegarias apresuradamente como si fueran una carga de la que nos queremos librar. Olvidamos que podemos entrar en el Tesoro del Rey con nuestras plegarias de la Amidá… ¿Hacia dónde estamos tan apurados por llegar?

 

 

 

Leer libros y artículos para entender el significado de los rezos

 

 

 

Las diecinueve bendiciones de la Amidá están llenas de significados profundos. Hay varios libros muy buenos que pueden ayudarte a aprender el significado de lo que estás diciendo y añadir intensidad y poder a tus oraciones. Algunos ejemplos son Praying with Fire, del rabino Heshy Klienman, y The Shemoneh Esrai, del rabino Avraham Chaim Feuer.

 

 

Reza para rezar – Persevera en tus esfuerzos

 

 

El Rabino Arush nos enseña a rezar con verdadera concentración y devoción:

 

Primero, debemos dedicar muchas horas de plegaria personal a pedirle a Hashem que nos dé la capacidad de rezar palabra por palabra con intención y devoción. En segundo lugar, nunca debemos rendirnos.

 

 

 

Recordemos:

 

 

 

* Antes de empezar a rezar recuerda que estás ante Alguien que te ama y posee un poder ilimitado.

 

 

 

* Haz una pausa antes de cada bendición y piensa en lo que vas a pedir.

 

 

 

* Reflexiona sobre cada palabra antes de que te salga de la boca de modo tal que tus palabras se conviertan en expresiones personales directo de tu corazón.

 

 

 

* Haz una pausa de nuevo antes de la bendición final para reenfocarte y asegurar un cierre poderoso.

 

 

 

* No dejes que la Mala Inclinación se salga con la suya: lucha contra los contratiempos temporales y reclama todas las palabras preciosas que puedas.

 

 

 

* Aprovecha el poder de la canción para potenciar la alegría y la intención.

 

 

 

* Ve más despacio, tómate tu tiempo y maximiza tu experiencia ante el Rey – no te apresures a salir del tesoro del Rey.

 

 

 

* Lea libros y artículos sobre el Shemoné Esré para informarte e inspirarte.

 

 

 

* Pídele a Hashem para que te ayude a mejorar tus oraciones. Sé paciente, persevera y cree en el poder de tu rezo.

 

 

 

Y, que en el mérito de fortalecernos en este ámbito, Hashem responda a nuestras peticiones para bien y nos proporcione lo que necesitamos para servirlo. Que esto acelere la plena redención de nuestro pueblo. Amén!

 

 

Escribe tu opinión!

1. anonimo

9/25/2021

Shabbat Shalom Rabino. Gracias por esta guía La necesitaba con suma urgencia seguiré los pasos con mucha obediencia.

2. Merlina Paruta

9/20/2021

Gracias Rabino por esta guía y así poder ser agradable a Hashem y disfrutar su Amistad y Amor.Shalom

3. Mariluz

9/07/2021

Saludos a todos , soy seguidora de ustedes y he aprendido mucho Es muy interesante esos consejos del Rabino Arush y Jonattan. Estoy batallando con la concentracion cuando rezo. Me duermo, pienso en muchas cosas., pero estoy tratando . Gracias

Gracias por tu respuesta

El comentario será publicado tras su aprobación

Agrega tu comentario