El Fracaso de Noé
A pesar de que Noé fue lo suficientemente digno como para evitar la destrucción y ser designado (segundo) padre de la humanidad, a pesar de sus esfuerzos, falló en su intento…
A pesar de que Noé fue lo suficientemente digno como para evitar la destrucción y ser designado (segundo) padre de la humanidad, a pesar de sus esfuerzos, falló en su intento…
Reseña histórica de los 7 Mandamientos – Parte 2:
Cuando Di-s creó a Adán, lo puso en el Jardín de Edén. Este lugar, sería la morada (por excelencia) de la Divina Presencia. Pero cuando Adán contravino el mandato de Di-s, la Divina Presencia se “retrajo” abandonando la tierra en favor del primer cielo. [1] [2] Entonces, con el pecado de Caín (sobre Abel), la Divina Presencia partió desde el primer cielo al segundo cielo. Luego, Enosh invocó a ídolos, y la Divina Presencia partió del segundo al tercer cielo. Y desde el tercer cielo al cuarto por causa de la Generación del Diluvio.
A pesar de que Noaj fue lo suficientemente digno como para evitar la destrucción y ser designado (segundo) padre de la humanidad, a pesar de sus esfuerzos, falló en su intento por llevar a cabo una rectificación completa del pecado de Adán, que era necesaria para atraer a la Divina Presencia de vuelta a Su morada deseada (en la tierra). Uno de los primeros actos en que se ocupó al abandonar el arca fue plantar una viña (Gén. 9:20,21). La mayoría de los comentarios bíblicos son notablemente críticos respecto a este proceder. Después de todo, la humanidad apenas había sido destruida. Plantar una viña para hacer vino de su fruto se presenta totalmente inapropiado bajo dichas circunstancias. Pero hay quienes dicen que Noaj estaba intentando rectificar el pecado de Adán. El Talmud presenta la opinión de que el fruto del árbol del conocimiento era la vid. [3]
Lo que Adán habría hecho es beber vino de una manera profana. Habría sido la intensión de Di-s que Adán esperara hasta el Shabat, que llegaría en unas cuantas horas, y entonces el fruto del árbol (la uva) sería usado para santificar el Shabat y testimoniar el hecho de que Di-s había creado el mundo en seis días y al séptimo había descansado. [4] Se argumenta que Noaj conocía este profundo significado de la transgresión de Adán: que plantando una viña y usando el vino para fines santos, él podría alcanzar la rectificación completa del pecado. Pero Noaj falló. Se intoxicó y fue descubierto desnudo por su hijo menor, Jam, quien lo avergonzó al llamar a sus dos hermanos, Shem y Jafet (Yéfet), para que vean la desnudez de su padre. Rashi comenta sobre este verso (Gén. 9:22) que Jam, ya sea, castró a su padre o tuvo relaciones inapropiadas con él, o ambas cosas. Shem y Jafet respetuosamente cubrieron a su padre con una prenda de vestir, pero el daño ya había sido hecho. Noaj despertó y maldijo a Jam y a sus descendientes, y la Divina Presencia “miraba apenada desde lo alto” (Gén. 9:23-27).
Las Siete Leyes de los Hijos de Noaj permanecieron desatendidas por todos, como antes del Diluvio, excepto por unos pocos: notablemente Shem (hijo de Noaj) y su nieto Eber establecieron Casas de Estudio con el propósito de entender y cumplir con las Siete Leyes. [5] [6]
Entonces vino la generación de la Torre de Babel. Esta fue una generación de científicos brillantes. No sólo que aprendieron a manipular muchas de las fuerzas de la naturaleza (e.g. control del clima), sino que razonaron en su sabiduría (científica) que la tierra no tenía un Creador, o que, al menos, si tuvo un Creador, que ellos eran iguales a El; y construyeron una torre hacia el cielo para retar la autoridad de Di-s. Científicamente concluyeron que, puesto que el Diluvio vivenciado por Noaj ocurrió en el año 1656 (después de la creación), esto significaba que cada 1656 años los cielos se remecerían, las profundidades se abrirían y la lluvia buscaría destruir la tierra. [7] Y la Biblia enseña, “Y descendió Di-s para ver la ciudad y la torre que edificaron los hijos del hombre.” (Gén.1:5). Esto fue ya desde el quinto cielo.
Di-s tomó medidas para frenar a sus hijos errantes al confundir sus lenguas y dispersarlos a tierras distantes (Gén.11:4). Originalmente, toda la humanidad hablaba una misma lengua, Hebreo el idioma de las Escrituras. [8] [9] [10] Pero ahora la humanidad había perdido este mérito, y desde entonces, para comunicarse, los hombres recurrían a alguno de los setenta idiomas originales del mundo.
En este tiempo, emergió el Rey Nimrod con una maldad que literalmente no tenía precedentes. Se proclamó a sí mismo dios de toda la tierra y ordenó a sus súbditos que lo adoraran como la deidad vigente. Quienes se rehusaban eran eliminados. [11] [12]
Nimrod fue llamado “un poderoso cazador delante del Señor” (Gén.10:9). Rashi comenta que la frase “un poderoso cazador” quiere decir que capturaba las mentes de los hombres con su boca y los guiaba hacia la rebeldía contra Di-s. “Delante de Di-s”, dice Rashi, indica que Nimrod intencionalmente provocó a Di-s, en Su Presencia. Nimrod, a diferencia de cualquier hombre que hubiese vivido antes, actuó malvadamente con el propósito de desafiar a Di-s. El conoció a su Creador y, a pesar de ello, se rebeló en contra de Él.
Di-s retrajo su Divina Presencia hasta el sexto cielo en respuesta a los pecados de Sodoma y Gomorra, principalmente robo y perversión sexual. En aquellas sociedades, se admiraba la crueldad; la bondad humana era fuertemente castigada, a menudo con la pena capital. [13]
Los antiguos egipcios completaron la secuencia de atrocidades al ser plena- mente fieles a sus muchos ídolos, al involucrarse mucho más que los Sodomitas en perversión sexual, y al desarrollar una nueva forma de extrema vileza – brujería. [14] Con la Divina Presencia removida hasta el séptimo cielo (el superior), la humanidad permaneció en un mundo de obscuridad moral y espiritual.
Finalmente, emergió un hombre justo cuyos actos empezaron a traer de vuelta a la Divina Presencia. Abraham confrontó solo al mundo aferrándose al Creador, cumpliendo con Su deseo. Retó la idolatría de Nimrod con su creencia en el Único Di-s; y, eventualmente derrotó completamente a Nimrod, empujando a la humanidad hacia el reconocimiento de Di-s y de Su camino para el mundo. Por el mérito de Abraham, la Divina Presencia descendió al sexto cielo. Debido al hijo de Abraham, Isaac, la Divina Presencia descendió desde el sexto hasta el quinto cielo; y entonces, desde el quinto al cuarto por el hijo de Isaac, Jacob.
Continuara…
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[1] Midrash Rabá, Cantar de los Cantares, 5:1 [2] Bati l’Gani, Maamar, del sexto Rebé de Lubavitch, Rabino Yosef Yitzchak Schneerson, de bendita memoria. [3] Talmud de Babilonia, Berajot 40a [4] Ta’amei HaMinhagim, sección 393 [5] Comentario de Rashi respecto de “Y ellos pelearon” (Gén.25:22) [6] Comentario de Rashi respecto de “Y ellos pelearon” (Gén.25:22) [7] Comentario de Rashi respecto de “Y se encontró en ese lugar” (Gén.28:11) [8] 12 Comentario de Rashi respecto de Gén.11:1. [9] Las veintidos letras del alef-bet que son consideradas en sí mismas los instrumentos de la Creación. [10] 14 Talmud de Jerusalén, Meguilá, capítulo 1, ley 9. [11] Comentario de Rashi respecto de Gén.11:1. [12] 16 Zohar, página 73. [13] Yalkut Me’am Loez, (Antología de la Torá), Génesis, volumen 1, página 356. [14] El comentario de Rashi respecto a Gén.18:21, menciona que la gente de Sodoma llevó a cabo una extraña y cruel muerte a una niña debido a que ésta había dado comida a un hombre pobre.
– Extraído con permiso del libro “El Camino del Gentil Justo”, traducido por Juan Mayorga Zambrano –
6/28/2019
Mil gracias por esta luz maravillosa. Que Dios bendiga al pueblo de Israel y no se olviden de México. Tal vez un hermano perdido.
5/10/2015
Excelente….
Muy buen artículo… Podrían continuar por favor???
5/10/2015
Muy buen artículo… Podrían continuar por favor???