Él está en todas partes
En cada objeto material, incluso en todos los idiomas del mundo, se puede encontrar a Dios.
En cada objeto material, incluso en todos los idiomas del mundo, se puede encontrar a Dios.
Y el propósito del hombre en la tierra es descifrar lo que Dios pretendía con las montañas y los mares, las flores y los pájaros, el fuego y las nubes
¡Cuán triste! ¡Cuán innecesario! Éste es el absurdo razonamiento del "o todo o nada", el cual hace caer a sus víctimas en el fatalismo...
En esos momentos, la solución consiste en borrar el pasado y empezar de nuevo, como si fuera la primera vez... Esa es la gran regla: ¡Empieza hoy!