Pautas para la vida – Perder el trono

En una de las historias más famosas de Rabí Najman, se cuenta que un viejo rey vio que su hijo era digno de ser rey ya, y decidió coronarlo mientras él mismo estaba aún con vida. Fue una ceremonia muy emotiva y feliz para todo el reino, y también para la familia real. 

Lo que sorprendió a todo el mundo fue el extraño discurso del rey en el momento álgido de los festejos, pronunciado como discurso principal de la ceremonia. Delante de todo el pueblo, el rey le dijo así a su hijo:

“Mi querido hijo, yo tengo la capacidad de predecir el futuro. Y sé que perderás el trono. Deseo guiarte en cuanto a cómo debes comportarte durante ese momento tan difícil. Aunque es una prueba muy difícil, que es suficiente para quebrar a cualquiera, te ordeno que no estés triste en absoluto; más bien, que sólo seas feliz. Y deberás saber que, si estás triste, me alegraré de que no seas el rey. Porque si estás triste, estarás demostrando que no eres digno de la realeza; pero si estás feliz durante los momentos difíciles, yo estaré muy feliz, por encima y más allá”.

Cuatro preguntas

Este es el párrafo inicial de una historia muy larga. Se pueden escribir volúmenes enteros sobre ella. pero por ahora plantearemos solamente unas cuantas preguntas a fin de extraer de ella algunos mensajes fáciles de entender. 

¿Cómo se puede ser feliz cuando se ha perdido toda la estima y el estatus?

Después de todo, es natural estar triste en un momento de crisis. Si es así, ¿por qué, si una persona se pone triste durante una crisis, no es digna de ser rey?

Esta es una pregunta muy difícil. Todo padre se aflige cuando su hijo sufre. Y aquí el viejo rey le dice a su amado hijo: “Si estás triste, me alegraré de que no seas rey”. Uno pensaría que un rey estaría doblemente angustiado: no sólo que su hijo está pasando por una grave crisis y setá a punto de perder el trono, sino que además está triste y destrozado – ¿dónde está el sentimiento paternal hacia su hijo? ¿Cómo puede el rey puede ser feliz?

¿Por qué el rey le dice estas cosas a su hijo, especialmente en la coronación, en el momento más feliz?

¿Qué es el éxito?

Intentaremos responder a estas preguntas, con la ayuda de Hashem.

En primer lugar, esta historia es una parábola acerca de la vida del hombre en este mundo. El Creador le dio a cada persona un estatus real, o sea, un papel. Y el Creador siempre está ahí, y ve cómo la persona cumple su papel.

¿Cómo puede uno ser feliz cuando pierde el trono? La respuesta es que una persona que vive la verdad de que la realeza no le pertenece nunca sentirá que la ha perdido. Cuando el rey recuerda todo el tiempo que su estatus real le es otorgado por el Creador, y que este es sólo un papel y una misión específica que el Creador le ha dado, y no siente que el trono le pertenece – entonces cuando cae de su alto estatus, no se enoja, porque sabe que fue Hashem Quien le confirió la misión de rey, y ahora le está dando una misión diferente. Su éxito no depende de su condición de rey, sino que sólo depende de hacer la voluntad del Creador en cada situación.

Siendo así, ¿por qué es tan malo estar triste? Porque el propósito del hombre y de la Creación es la emuná. Y la emuná no se mide por los momentos de éxito, sino precisamente por los momentos de fracaso y caída.

Sólo en esos momentos se demuestra si uno vive con emuná o no. Y dado que se entristece cuando pierde la corona, el príncipe está demostrando que pensó que el trono le pertenecía; no supo relacionarlo todo con Hashem, y eso es prueba de que está muy lejos de la emuná completa; tal estado de ánimo es lo contrario de su propósito y del propósito de la Creación.

¿Cómo se alegró el rey cuando cayó su hijo? Es cierto que el rey también es un padre, pero ante todo es responsable del reino y trata de procurar el bien del pueblo y del mundo. Coronó a su hijo porque creía que su hijo era digno de ello, pero si su hijo no vive con emuná y no demuestra emuná en su comportamiento, entonces su hijo es un rey perjudicial para el pueblo y para el mundo.

¿Y por qué el viejo rey se refiere a esto en la ceremonia de coronación? Porque para soportar una prueba tan difícil, uno debe empezar a trabajar en sí mismo desde el momento mismo de la coronación. La orientación que el rey está dando no se refiere sólo al momento de la crisis, sino que es una orientación práctica relacionada con todo el período de la realeza. El joven rey debe interiorizar, que él es sólo un agente del Creador y que el trono no le pertenece.