El Feliz Excavador, #5

¿Acaso sabía el capitán qué había pasado? Este pensamiento le atemorizó...

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Rab Yonatán D. Galed

Posteado en 06.04.21

Basado en una historia de: Rabi Najman de Breslev

Ilustrado Por: Rebeca Shapiro
 
 
¿Acaso sabía el capitán qué había pasado? Este pensamiento le atemorizó
 
 
El Feliz Excavador, Parte 5:
 
 
Al principio el excavador estaba un poco inquieto…
 
¿Acaso sabía el capitán qué había pasado? Este pensamiento le atemorizó.
 
Pero él sabía que HaShem sólo hace lo mejor posible.
 
Y por lo tanto, esta nueva situación era sólo una prueba de fe.
 
 
Entonces, se dirigió al capitán con una sonrisa radiante,
 
lleno de confianza en HaShem, y sin ningún miedo.
 
 
El capitán comenzó la conversación y dijo:
 
Sé que eres inteligente y honesto – una criatura noble, en verdad.
 
También eres un hombre muy rico, con tu gema especial…
 
 
Te contaré una cosa… Tengo un gran barco de granos que me gustaría vender
 
Tiene un valor de millones y millones y necesito tu ayuda.
 
Si lo pongo a mi nombre, me arriesgo a ser acusado de desfalco,
 
¡y mi nombre se manchará!
 
Si sólo pudiera ponerlo todo a tu nombre,
 
ambos sacaríamos una enorme ganancia y tendríamos fortuna y fama.
 
Nuestro excavador lo pensó un poco y luego estuvo de acuerdo,
 
y entonces el capitán firmó los documentos legales.
 
 
Unos días más tarde, el barco alcanzó la orilla de Londres
 
Y tan pronto como bajaron del barco,
 
el capitán cayó muerto como una piedra.
 
Su muerte fue tan brusca, que el excavador quedó sobresaltado.
 
 
La carga fue dejada en posesión de nuestro excavador,
 
y cuándo se dio cuenta del resultado,
 
¡deberían haber visto su expresión!
 
¡La carga valía muchas veces más que la rara gema!
 
¡Él sabía que éste era un regalo directo de HaShem!
 
 
"Me has dado tantas bendiciones,
 
elevaste mi corazón.
 
Mis pies bailan, mi alma canta:
 
¡Eleven todos alabanzas a HaShem!
 
¡¡Te agradezco tanto HaShem!!
 
 
El excavador vio con sus propios ojos –
 
¡¡cómo todo lo que HaShem hace es para bien!!,
 
¡vio cómo todas aquellas dificultades, eran sólo una prueba de fe!
 
 
Él bailó y él cantó mucho, más que nunca,
 
ya que cuando HaShem le cerró una ventana –
 
¡¡en realidad le abrió una enorme puerta!!
 
 
 
“… y entonces el capitán firmó los documentos legales”.
 
 
Continuará…

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1. Raul

11/20/2018

Pregunta

Rab Yonatan regalame 10 minutos de tu tiempo mi Correo es raulmoreno940@yahoo.com te lo agradecesco

2. Raul

11/20/2018

Rab Yonatan regalame 10 minutos de tu tiempo mi Correo es raulmoreno940@yahoo.com te lo agradecesco

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