Dale Una Oportunidad a la Paz

Cada afrenta a la paz en el hogar produce cicatrices en el alma del niño. La magnitud del daño depende de la sensibilidad del niño…

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Rabino Shalom Arush

Posteado en 18.03.21

Cada afrenta a la paz en el hogar produce cicatrices en el alma del niño. La magnitud del daño depende de la sensibilidad del niño…

Para poder criar a un niño feliz y equilibrado hay que tener armonía matrimonial. El niño debe tener padres refinados. ¿Qué es un padre refinado? Un padre refinado es aquel que le habla con respeto y honra a su cónyuge, siempre tiene una buena palabra, es alentador, paciente en los momentos de mucha presión, benevolente, altruista, buen oyente, entre otras tantas virtudes.

Los niños de los padres que se aman el uno al otro y son “el mejor amigo” el uno del otro aprenden a emular estos rasgos positivos de amor y amistad. Cuando los niños ven el respeto mutuo, la entrega, el amor… cuando ven que sus padres se alientan uno a otro luego de errores cometidos, sin intentar destruirse, sino más bien, se fortalecen juntos porque se aman- entonces es que los niños emulan este comportamiento. Los niños que ven que sus padres son felices juntos y viven la vida en alegría de acuerdo con los principios de la Torá – ellos también aprenden a vivir la vida con alegría.

Los padres deben hacer todo lo posible para garantizar la armonía marital. En nuestros libros acerca de armonía en el hogar (El Jardín de la Paz para los hombres y Sabiduría Femenina para las mujeres), explicamos cómo toda la abundancia y bendiciones, tanto en áreas espirituales y físicas, dependen de la felicidad conyugal.

Cada padre debería estudiar el libro respectivo en forma permanente, y rezar para poder cumplir todo lo que ha aprendido. Esto es algo completamente imprescindible. Que nadie se engañe. Como padres, estamos obligados a aprender los verdaderos fundamentos de la armonía matrimonial. Además de nuestra mutua obligación en virtud del vínculo matrimonial, también tenemos la obligación de ser responsables de las almas puras que nos fueron confiadas. Los padres deben proteger las tiernas almas de sus hijos evitando toda clase de conflictos matrimoniales.

Los niños que crecen en un hogar pacífico tienen un estado emocional saludable. Ellos están preparados para sacar provecho de todos sus poderes emocionales y vivir una vida llena de verdad y fe. Ellos absorben las cualidades positivas de sus padres – toda la calidez, el amor y la amistad que los padres se demuestran el uno al otro y que también es para sus hijos. En este tipo de hogar, los niños crecen con una fuerte alegría por la vida y un fuerte deseo de vivir, con un tremendo poder para realmente tener éxito en este mundo.

Los niños de hogares felices generalmente no son víctimas de las influencias negativas de la calle. Son tan felices en sus hogares que lo que sucede afuera no les resulta atractivo. Incluso si ellos entran en contacto con influencias negativas, ellos perciben el contraste entre la negatividad externa y el ambiente positivo que tienen en casa y hablan de esto con sus padres, y estos pueden ayudarlos y dirigirlos, creando otro profundo e importante escalón en la educación de sus hijos. Apertura y dirección basada en el amor y la comprensión.

Con el fin de entender el lado positivo de la educación de los hijos sobre una base de paz en el hogar, tenemos que explicar qué es lo que ocurre cuando sucede lo contrario: ¿Qué pasa con los niños que crecen en un hogar que carece de armonía matrimonial, el cielo no lo permita?

El daño es grande, por desgracia. Cada afrenta a la paz en el hogar produce cicatrices en el alma del niño. La magnitud del daño depende de la sensibilidad del niño. Hay almas muy sensibles que son dañadas por la tensión más sutil. Otras almas son dañadas inclusive por peleas menores. Está claro, sin embargo, que cada tipo de altercado marital crea problemas emocionales, traumas, cicatrices, y enfermedades mentales en los niños. Por desgracia, a menudo encontramos gente que creció con daños en su alma causados por la falta de paz conyugal entre los padres. Este daño es difícil de corregir.

A menudo me encuentro con padres y abuelos que confidencialmente reconocen que albergan odio hacia su padre por haberle hecho a su madre la vida imposible, o viceversa. Ellos simplemente no pueden olvidar y perdonar a sus padres por los conflictos que vieron en sus hogares. Hay otros que no están en condiciones de casarse a causa del matrimonio amargo de sus padres. Hay también otras tantas consecuencias terribles, todo como resultado de lo que se imprime en las almas de los niños en los climas de tensión e incluso hostilidad absoluta del hogar en que se criaron.

La disfunción de la relación de los padres debilita los niños. Ellos están asustados por las imágenes aterradoras que ven, gente adulta que a sus ojos son como gigantes gritándose el uno al otro, amenazando con expresiones aterradoras y más. Tal vez los padres piensen que simplemente se están desahogando y que en realidad no tienen previsto aplicar las amenazas y maldiciones que inconscientemente emanan de sus bocas. Pero para el niño, suena todo verdadero y lo asusta terriblemente. El pequeño empieza a imaginar escenarios aterradores. ¿Quién sabe hacia dónde lo llevarán sus oscuros pensamientos? ¿Y qué pasa cuando hay violencia física, Dios no lo quiera? Esto causa un daño irreparable a la psique del niño.

Podemos escribir un grueso tomo con historias de personas con problemas emocionales a causa de las cicatrices que les quedaron por haber tenido una infancia en la que los padres no lograron llevarse bien.

Antes de darse el "lujo" de perder los estribos, los padres deben recordar que su relación matrimonial tiene enormes implicancias para el futuro de sus hijos. Por eso les digo: ¡Denle a la paz una oportunidad, por el bien de sus hijos!

 

 

 

 

 

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1. Gloria

1/05/2018

QUE DIFICIL

CUANDO UNO DE LOS DOS NO SE DA CUENTA O NO QUIERE ENTENDER, ES MUY DIFICIL….TENDRIAN QUE PONER LOS DOS DE SU PARTE

2. Gloria

1/05/2018

CUANDO UNO DE LOS DOS NO SE DA CUENTA O NO QUIERE ENTENDER, ES MUY DIFICIL….TENDRIAN QUE PONER LOS DOS DE SU PARTE

3. Consuelo Álvarez

1/04/2018

Que puedo hacer, si mi hijo tiene ya 11 años, vio todo tipo de problemas, quiero solucionar, me propongo darle la oportunidad a la paz, ….que más hago, gracias…que libro me aconsejan.. gracias

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