Esto ya es insoportable!
El vicepresidente de los EEUU de Norteamérica está separando a los judíos norteamericanos y diciéndoles que no esperen que su país los proteja del peligro.
No me crean si no quieren cuando les digo que los judíos están en situación de peligro en Norteamérica. Pero les aseguro que al Rebe de Riminov pueden creerle. Garantizado
.
El mes de marzo pasado, el Rebe de Riminov advirtió que en el futuro próximo habrá una guerra y que los EEUU “serán un lugar peligroso” para los judíos.
Tal como afirma el sitio JP Updates, el Rebe dijo que “…aún es demasiado temprano como para decir qué estados dentro de los EEUU van a sobrevivir, pero muchas partes serán destruidas y envenenadas, y hasta se desatará una guerra civil dentro de los EEUU y habrá estados que se separarán del gobierno federal. Los EEUU no pueden ser usados de refugio pero habrá sobrevivientes”.
Si este sombrío pronóstico llega a hacerse realidad, ¿acaso los EEUU protegerán a sus ciudadanos judíos?
El vicepresidente Joe Biden dice que no.
En una charla con una delegación de líderes y funcionarios judíos del gobierno de Obama hace algunos meses, Biden afirmó que los judíos no pueden confiar en Norteamérica para su seguridad. Esto fue lo que les dijo en forma textual a los judíos norteamericanos: “Ustedes entienden en sus huesos que por más hospitalarios, más importantes, más comprometidos, por más dedicados que sean en los EEUU, existe un sola garantía. En realidad existe una sola garantía absoluta: el Estado de Israel”.
Traducción: el vicepresidente de los EEUU de Norteamérica está separando a los judíos norteamericanos y diciéndoles que no esperen que su país los proteja del peligro.
Con la creciente ola de atentados antisemitas, muchos judíos norteamericanos ya huelen el peligro en el aire, e incluso un número cada vez más grande de judíos observantes llevan armas en Shabat para poder defenderse en caso de ataque. Eso, además de la policía local, que se apostan en sus patrulleros afuera de las sinagogas todos los Shabat y las fiestas judías en muchas ciudades de importancia, como por ejemplo, Chicago.
Pero a medida que cada vez más sinagogas necesitan protección, lo que provee la mejor protección es lo que sucede dentro de las sinagogas.
Después del Holocausto, el Rebe de Gur, el famoso Imrei Emet, planteó un interrogante: Por qué los judíos sefaradíes se salvaron de los horrores del Holocausto si bien los alemanes habían llegado al norte de Africa.
¿Su respuesta?
Porque los judíos sefaradíes no hablaban en las sinagogas entre una plegaria y otra.
O sea que el mero hecho de no involucrarse en una conversación durante los rezos es capaz de salvar vidas en épocas de peligro. Hoy en día este hecho muchas veces ignorado cobra enorme relevancia, a medida que las autoridades norteamericanas advierten que los judíos de Norteamérica se encuentran frente a un gran peligro.
El Rebe de Riminov no es el único líder rabínico que predice un sombrío futuro para los judíos de Norteamérica. El Kabalista Rabí Yehuda Zev Leibowitz, entre otros, advirtió que los judíos de Norteamérica han de sufrir una catástrofe.
Ahora que se hace obvio que la Era Dorada de las comunidades judías de Norteamérica están llegando a su fin (y la historia judía demuestra que cada Era Dorada siempre terminó mal), el ambiente parece estar cada vez más maduro para tales predicciones. Es ahora muy común ver en Norteamérica cruces esvásticas pintadas en los negocios judíos, escuchar furiosas convocaciones a boicotear productos israelíes (o sea, judíos) y ver campuses de las facultades transformarse en hirvientes caldos de cultivo para el odio a los judíos, exactamente igual que sucedió con anterioridad al Holocausto.
De todas las transgresiones que existen en el mundo y que el judío puede cometer, desde comer en Yom Kipur hasta cometer adulterio, la única que el Shulján Aruj menciona como algo “ya imposible de soportar” es ponerse a hablar en la sinagoga durante la repetición de la plegaria Shemone Esre.
Por desgracia, la historia nos confirma este dato. El famoso Tosefot Yom Tov (1579-1653) atribuyó la masacre de decenas de miles de judíos durante el levantamiento de Chielminicki de 1648-49 a la transgresión de hablar en la sinagoga durante los rezos.
Una vez escribió el Rabino Shimon Schwab que nuestro reverente silencio durante los rezos habla muy alto ante Él, Quien tiene nuestro destino en Sus manos. Comunicarse con Hashem es nuestro único recurso en esta época de pruebas y tribulaciones”. Y la época en la que vivimos es ciertamente una época de pruebas y tribulaciones.
Fue con gran sorpresa que un Shabat, no hace mucho tiempo, me encontré en una sinagoga norteamericana cuyos asistentes estaban muy lejos de guardar silencio durante los rezos. Durante la repetición del Shemone Esre, varios grupos de hombres mantenían una animada conversación, hablando a toda voz, como si estuvieran en un gimnasio o en una sala de juntas
7/06/2015
comentario
estoy totalmente de acuerdo yo tuve esa experiencia este shabbat en nuestra sinagoga paso un carro por la calle con la bandera de isis yo me quede pensando eso mismo con tanta falta de reverencia al Eterno(cualquier cosa puede pasar si no dejan de hablar y me dio temor
7/06/2015
estoy totalmente de acuerdo yo tuve esa experiencia este shabbat en nuestra sinagoga paso un carro por la calle con la bandera de isis yo me quede pensando eso mismo con tanta falta de reverencia al Eterno(cualquier cosa puede pasar si no dejan de hablar y me dio temor