Así es, hace un mes que salvé la vida por no hacerle caso al médico. Fue el día del juicio por divorcio, por la tarde celebré la "despedida de casado" y tomé en exceso. Al llegar a casa, caí de espaldas y me di un golpe en la cabeza, en la zona occipital, que me causó un corte de seis cms. de largo, y me quedé dormido. Al día siguiente, cuando desperté, vi la sangre, y fui al centro de Salud. Hace años tuve una fibrilación , que me tuvieron que soltar un chispazo de más de dos mil voltios para resetear y formatear el corazón, y el cardiólogo me mandó tomar Sintrón, un anticoagulante que tiene la misma composición que la aspirina, me dijo que lo tenía que tomar de por vida. Dado que tengo fobia a los fármacos, no le hice caso, y la doctora que me atendió en primer lugar, me comentó, después de revisar el historial, que si lo hubiera estado tomando, lo más probable es que hubiera muerto desangrado. Luego otro médico me dijo que, días atrás, una doctora del centro se mató por una caída similar, y que si el golpe lo hubiera recibido un par de cms. a la izquierda, tampoco lo hubiera contado. Luego el enfermero que me hizo la cura, me dijo que le caigo muy bien al de "Arriba". Es la segunda vez que salvo la vida por desobedecer al médico. La primera fue en los años noventa, que tuve una depresión por acoso en el trabajo, y el loquero (psiquiatra) me prescribió un par de psicofármacos que, luego me enteré investigando por la Internet, que estaba expresamente contraindicado tomarlos juntos, y uno de ellos fue retirado del mercado porque causaba "muerte súbita". El que "mataba" dejé de tomarlo al tercer día porque me producía una sedación tan brutal que me dejaba "zombi" todo el día. Años más tarde leí que se trataba de un antipsicótico muy fuerte, indicado como "último recurso" para esquizofrénicos que no respondían a otros tratamientos. Ésto fue lo que originó mi "farmafobia" actual.
2. Sergio Alvarez-Mori Fernández
4/10/2017
Así es, hace un mes que salvé la vida por no hacerle caso al médico. Fue el día del juicio por divorcio, por la tarde celebré la "despedida de casado" y tomé en exceso. Al llegar a casa, caí de espaldas y me di un golpe en la cabeza, en la zona occipital, que me causó un corte de seis cms. de largo, y me quedé dormido. Al día siguiente, cuando desperté, vi la sangre, y fui al centro de Salud. Hace años tuve una fibrilación , que me tuvieron que soltar un chispazo de más de dos mil voltios para resetear y formatear el corazón, y el cardiólogo me mandó tomar Sintrón, un anticoagulante que tiene la misma composición que la aspirina, me dijo que lo tenía que tomar de por vida. Dado que tengo fobia a los fármacos, no le hice caso, y la doctora que me atendió en primer lugar, me comentó, después de revisar el historial, que si lo hubiera estado tomando, lo más probable es que hubiera muerto desangrado. Luego otro médico me dijo que, días atrás, una doctora del centro se mató por una caída similar, y que si el golpe lo hubiera recibido un par de cms. a la izquierda, tampoco lo hubiera contado. Luego el enfermero que me hizo la cura, me dijo que le caigo muy bien al de "Arriba". Es la segunda vez que salvo la vida por desobedecer al médico. La primera fue en los años noventa, que tuve una depresión por acoso en el trabajo, y el loquero (psiquiatra) me prescribió un par de psicofármacos que, luego me enteré investigando por la Internet, que estaba expresamente contraindicado tomarlos juntos, y uno de ellos fue retirado del mercado porque causaba "muerte súbita". El que "mataba" dejé de tomarlo al tercer día porque me producía una sedación tan brutal que me dejaba "zombi" todo el día. Años más tarde leí que se trataba de un antipsicótico muy fuerte, indicado como "último recurso" para esquizofrénicos que no respondían a otros tratamientos. Ésto fue lo que originó mi "farmafobia" actual.
4/10/2017
Salvé la vida por no hacerle caso al médico
Así es, hace un mes que salvé la vida por no hacerle caso al médico. Fue el día del juicio por divorcio, por la tarde celebré la "despedida de casado" y tomé en exceso. Al llegar a casa, caí de espaldas y me di un golpe en la cabeza, en la zona occipital, que me causó un corte de seis cms. de largo, y me quedé dormido. Al día siguiente, cuando desperté, vi la sangre, y fui al centro de Salud. Hace años tuve una fibrilación , que me tuvieron que soltar un chispazo de más de dos mil voltios para resetear y formatear el corazón, y el cardiólogo me mandó tomar Sintrón, un anticoagulante que tiene la misma composición que la aspirina, me dijo que lo tenía que tomar de por vida. Dado que tengo fobia a los fármacos, no le hice caso, y la doctora que me atendió en primer lugar, me comentó, después de revisar el historial, que si lo hubiera estado tomando, lo más probable es que hubiera muerto desangrado. Luego otro médico me dijo que, días atrás, una doctora del centro se mató por una caída similar, y que si el golpe lo hubiera recibido un par de cms. a la izquierda, tampoco lo hubiera contado. Luego el enfermero que me hizo la cura, me dijo que le caigo muy bien al de "Arriba". Es la segunda vez que salvo la vida por desobedecer al médico. La primera fue en los años noventa, que tuve una depresión por acoso en el trabajo, y el loquero (psiquiatra) me prescribió un par de psicofármacos que, luego me enteré investigando por la Internet, que estaba expresamente contraindicado tomarlos juntos, y uno de ellos fue retirado del mercado porque causaba "muerte súbita". El que "mataba" dejé de tomarlo al tercer día porque me producía una sedación tan brutal que me dejaba "zombi" todo el día. Años más tarde leí que se trataba de un antipsicótico muy fuerte, indicado como "último recurso" para esquizofrénicos que no respondían a otros tratamientos. Ésto fue lo que originó mi "farmafobia" actual.
4/10/2017
Así es, hace un mes que salvé la vida por no hacerle caso al médico. Fue el día del juicio por divorcio, por la tarde celebré la "despedida de casado" y tomé en exceso. Al llegar a casa, caí de espaldas y me di un golpe en la cabeza, en la zona occipital, que me causó un corte de seis cms. de largo, y me quedé dormido. Al día siguiente, cuando desperté, vi la sangre, y fui al centro de Salud. Hace años tuve una fibrilación , que me tuvieron que soltar un chispazo de más de dos mil voltios para resetear y formatear el corazón, y el cardiólogo me mandó tomar Sintrón, un anticoagulante que tiene la misma composición que la aspirina, me dijo que lo tenía que tomar de por vida. Dado que tengo fobia a los fármacos, no le hice caso, y la doctora que me atendió en primer lugar, me comentó, después de revisar el historial, que si lo hubiera estado tomando, lo más probable es que hubiera muerto desangrado. Luego otro médico me dijo que, días atrás, una doctora del centro se mató por una caída similar, y que si el golpe lo hubiera recibido un par de cms. a la izquierda, tampoco lo hubiera contado. Luego el enfermero que me hizo la cura, me dijo que le caigo muy bien al de "Arriba". Es la segunda vez que salvo la vida por desobedecer al médico. La primera fue en los años noventa, que tuve una depresión por acoso en el trabajo, y el loquero (psiquiatra) me prescribió un par de psicofármacos que, luego me enteré investigando por la Internet, que estaba expresamente contraindicado tomarlos juntos, y uno de ellos fue retirado del mercado porque causaba "muerte súbita". El que "mataba" dejé de tomarlo al tercer día porque me producía una sedación tan brutal que me dejaba "zombi" todo el día. Años más tarde leí que se trataba de un antipsicótico muy fuerte, indicado como "último recurso" para esquizofrénicos que no respondían a otros tratamientos. Ésto fue lo que originó mi "farmafobia" actual.