Los desafíos de los noájidas

Para muchos noájidas, el factor “soledad” es probablemente el más terrible. Para muchos en USA y en otros países en los que no existen grupos grandes de gentiles no idólatras (léase noájidas), la soledad puede resultar una pesada carga. Especialmente entre aquellos que salieron del cristianismo, en el que una comunidad de personas con creencias similares suelen congregarse.

Junto con la soledad, existe un desafío que yo acuñé a partir de mi propia experiencia, y al que llamo “el vacío de adoración”. A nosotros nos encantaban las alabanzas y la música de adoración en la iglesia. Pero todo llegó a su fin cuando tiramos a la basura toda la música idólatra. Incluso ahora, diez años más tarde, todavía nos vienen a la cabeza ciertas melodías junto con las emociones que contienen. A cierta altura llegué a una situación tal que me daba miedo cantarle a Dios por lo que se me podía llegar a escapar, algo que todavía formaba parte de mí por mucho que me esforzaba por sacármelo de encima.

Hay muchos cantantes judíos ortodoxos con canciones que tienen letras excelentes. El Tanaj está repleto de palabras de inspiración con las cuales se pueden componer maravillosas canciones.

La música noájida es un área en la que existe una carencia actualmente. Pero eso no debería impedirnos alabar al Creador.

Además está el problema de los casamientos mixtos (me refiero a que hay personas que hicieron solas el viaje noájida y su pareja todavía sigue en la religión idólatra). Yo conozco a varios que están en esta situación. Aquellos que tienen relaciones exitosas y que están en esta situación apoyan a sus parejas, sin tratar de meterles a la fuerza lo que han aprendido acerca del noajismo, dejando que avancen a su propio ritmo.

Otro desafío que surge a menudo es el tema de conocer pareja. Ya sea si eres un adulto soltero o padre de adolescentes, esto puede ser una prueba muy difícil.

Aquellos que buscan pareja con creencias similares a veces tienen que mudarse a otra zona. Esto puede resultar difícil para padres de hijos en edad escolar.

La próxima semana analizaremos el otro aspecto del noajismo: la dicha inmensa de haber descubierto la verdad.