La llamada de Netanyahu: Cómo cada judío puede asegurar el futuro de Israel

La llamada a la acción de Netanyahu: Cómo cada judío puede asegurar el futuro de Israel

Una herencia de héroes: Netanyahu desafía a los judíos a honrar a sus antepasados y a salvaguardar Israel viviendo según la ley de Am Yisrael Chai.

He aquí que hoy he puesto delante de ti la vida y el bien, y la muerte y el mal. Devarim 30:15

Esto no es un choque de civilizaciones. Es un choque entre la barbarie y la civilización. Es un choque entre los que glorifican la muerte y los que santifican la vida. – Primer Ministro Binyamin Netanyahu

Después de que nuestro Primer Ministro, Binyamin Netanyahu, hablara ante el Congreso estadounidense el 24 de julio, todos los judíos se pusieron un poco más erguidos.

Su franqueza y claridad nos hicieron darnos cuenta de los retos a los que nos enfrentamos y de las medidas que debemos tomar para continuar la misión de nuestros antepasados y transmitirla a nuestros hijos.

Nuestro querido Bibi nos inspiró recordándonos quiénes somos, de dónde venimos y cómo nuestra misión sirve a toda la humanidad.

El vínculo inquebrantable entre el pueblo judío y la Tierra de Israel

¿Acaso no saben que la Tierra de Israel es donde rezaron Abraham, Isaac y Jacob – donde hablaron Isaías y Jeremías, y donde gobernaron David y Salomón? Durante casi 4.000 años, la Tierra de Israel ha sido la patria del pueblo judío. Siempre ha sido nuestro hogar y siempre lo será. – Primer Ministro Binyamin Netanyahu

Los medios de comunicación intentan pintarnos como ladrones ilegítimos que robaron la casa de otro y siguen ocupando el territorio de otra nación. Pretenden debilitarnos difundiendo esta propaganda desmoralizadora.

Pero la verdad es que somos la única nación del mundo a la que nuestro Creador ordenó vivir en un lugar específico. No hay otra nación a la que en forma explícita Aquel que crea la tierra y las naciones que viven en ella le haya ordenado a vivir en un área de la Tierra que Él hizo – excepto el Pueblo Judío.

No hay ningún mandamiento Divino para que los españoles vivan en España. No hay ninguna palabra de Dios que diga que los chinos deben vivir en China. No hay nada escrito en ningún texto sagrado sobre que los árabes tengan que vivir en Arabia Saudita… o en Israel.

El único mandamiento directo de Dios de vivir en un área específica es Su mandamiento a Su nación, nosotros, de vivir en la Tierra de Israel.

En Israel, somos descendientes de profetas y reyes. Cuando miles de millones de cristianos leen la Biblia, leen sobre Dios y Su relación con ellos.

Cuando el pueblo judío lee la Biblia, nosotros leemos sobre el viaje de Dios con nosotros.

Somos los hijos de Israel, que vivimos en la Tierra de Israel, cumpliendo la Torá de Israel, para servir al Dios de Israel.

Somos los descendientes de Avraham, Itzjak, Yaakov, David, Shlomo, Isaías y Jeremías. Cumplimos los mismos mandamientos Divinos que ellos y vivimos en la misma Tierra en la que ellos vivieron por la misma razón: ¡Dios así nos lo ha ordenado!

Dejando atrás la comodidad: Los sacrificios que los judíos hacen por su hogar ancestral

Nuestra nación nació cuando el primer judío realizó la primera circuncisión. Él selló el pacto entre Dios y el Pueblo Judío en el que Hashem será para siempre nuestro Rey, y nosotros seremos para siempre Su pueblo.

El pacto fue sellado en la Tierra de Israel.

Desde entonces, fuimos exiliados a Egipto, y regresamos a Israel. Fuimos exiliados a Babilonia, y regresamos a Israel. Casi fuimos aniquilados por los persas, y regresamos a Israel. Miles de años después, casi fuimos aniquilados por los nazis, y sobrevivimos, y volvimos a Israel.

Cada vez que rezamos, rezamos en dirección a Israel. Cada vez que comemos, rezamos por la restauración de Jerusalén. Antes de rezar por los alimentos que comemos, recitamos un salmo, ya sea lamentando la pérdida de nuestra tierra santa o celebrando nuestro inminente regreso.

Un chino nunca dejará una vida acomodada en USA para volver a China. Un irlandés nunca dejará una vida de lujo para plantar patatas en Belfast: por cada irlandés que vive en Irlanda, hay cinco irlandeses que viven en América. Un sirio no volvería a Siria: uno de cada seis sirios vive en Europa o Turquía.

En el caso de los judíos, ocurre precisamente lo contrario.

Cientos de miles de judíos abandonaron la relativa comodidad de las naciones en las que vivían para trasladarse a Israel, donde las perspectivas de subsistencia y comodidades materiales son menores. El PIB per cápita en Estados Unidos es un 60% superior al de Israel.

A pesar de que esta “brecha” en el nivel de vida se está cerrando muy rápidamente, los judíos siguen trasladándose a Israel en masa.

Desde Caroline Glick, que estudió en Harvard, hasta Michael Oren, que estudió en Princeton, y Biniamin Netanyahu, que estudió en el MIT, todos ellos renunciaron a lo que podrían ser vidas muy cómodas y acomodadas en Estados Unidos para vivir en Tierra Santa.

Ellos representan a cientos de miles de judíos estadounidenses y europeos que hicieron exactamente lo mismo. Ninguna otra nación del mundo ha dado la bienvenida a tantas personas dispuestas a hacer tantos sacrificios simplemente porque sabían quiénes eran y de dónde venían.

Elegir la vida: La misión eterna de Am Israel Jai

Nuestra misión es elegir siempre la vida. Vivir al máximo el mandato eterno de Dios de que Am Israel Jai.

No vivimos respirando o meramente existiendo para la siguiente generación.

Dios establece criterios específicos para que cada judío sea meritorio de la preciada condición de elegir la vida .

Justo después de que Dios nos presenta la vida y el bien frente a la muerte y el mal, nos dice lo que significa la vida:

Te ordeno hoy que ames al Eterno, tu Dios, que sigas Sus caminos y observes Sus mandamientos, Sus estatutos y Sus ordenanzas, para que vivas y crezcas, y el Eteron, tu Dios, te bendiga en la tierra a la que vienes para tomar posesión de ella

                                                                  (Devarim 30:16)

La vida es cumplir la Torá, la palabra de Dios. La vida es recibir la bendición de Dios en la Tierra que Él nos da para poseer. La vida es merecer para nosotros y para los demás la seguridad Divina en la Tierra de Israel. Vivimos cumpliendo más mitzvot, mejorando nuestro comportamiento diario y rezando con mayor intención.

Más allá del campo de batalla: El papel de cada judío en la seguridad de Israel

Nuestros hijos e hijas conforman el ejército más valiente y feroz de la Tierra.

Pero ¿pueden ganar sin nosotros, los millones de judíos que no servimos en el frente militar? Ellos nos necesitan para luchar por la vida con tanta pasión como ellos.

En la división del Mar Rojo, y en la guerra entre Ezequías y los asirios, Hashem nos bendijo con la victoria sin un solo soldado.

Nuestra primera victoria contra Amalek no llegó cuando nuestras fuerzas militares rompieron sus defensas, sino cuando Moshé elevó sus manos a Hashem en plegaria. Nuestra victoria contra los griegos llegó con sólo un puñado de soldados, ninguno entrenado para luchar.

Nosotros tenemos el honor especial de dar a nuestras tropas el mayor apoyo posible:

Al jurar nunca odiar a nuestro hermano judío en nuestros corazones, nunca difundir historias, calumnias o insultos contra nuestro hermano judío, y al jurar establecer horas fijas para el estudio de la Torá, nos hacemos meritorios de la protección de Dios – mereciendo Su bendición de protegernos en la Tierra de Israel al caminar en Sus caminos a través de Sus mandamientos, estatutos y ordenanzas.

Como ocurrió con Inglaterra en 1941, hoy nosotros en Israel estamos cara a cara con las fuerzas del mal. Somos lo que se interpone entre un mundo pacífico y próspero y monstruos salvajes que lo destrozan.

Nuestra lucha es la lucha del mundo entero. Nuestra victoria asegura a la humanidad.

Cada acto positivo que hacemos en nombre de la vida sirve a la gente buena de la tierra. Dios nos da la misión última de llevar Su luz a nuestro mundo para que todos se beneficien.

Este beneficio global no vendrá a través de discursos poderosos. No vendrá a través de influenciadores de las redes sociales. No vendrá de nuestros líderes políticos o empresariales. Ni siquiera vendrá únicamente a través de la valentía de nuestros grandes soldados.

Llegará a través de nuestro sacrificio, a través de las decisiones cotidianas, incluso momentáneas, que tú y yo tomemos y que cambiarán el mundo.

Nuestra batalla, cada día, es preguntarnos: ¿Qué mitzvá puedo hacer hoy para merecer la paz y la vida para el pueblo judío en nuestra Tierra Santa?

Al final de su discurso, Bibi hace sonar el shofar para que todos actuemos: No importa cuánto tiempo nos lleve, no importa lo difícil que sea el camino que tenemos por delante, Israel no desistirá, Israel no se doblegará. Defenderemos nuestra Tierra. Defenderemos a nuestro pueblo. Lucharemos hasta conseguir la victoria. La victoria de la libertad sobre la tiranía. La victoria de la vida sobre la muerte. La victoria del bien sobre el mal.

Para lograr este noble triunfo, depende de nosotros luchar con más mitzvot, mejores rasgos de carácter, más Torá y más emuná.

David Ben Horin vive en Afula con su familia, millones de girasoles y Matilda, nuestra camella local. Lastartup israelí de David, 300 Marketing Solutions, es una agencia de lean marketing para startups y pequeñas empresas que crea y promociona ROI optimizados para SEO dirigidos a la audiencia adecuada en LinkedIn para que tu negocio sea la estrella del espectáculo.