La bendición de la pureza familiar

 “Ella estará en estado de separación…” (Levítico 15:19).

El pasaje citado en su totalidad es la fuente de las leyes judías de pureza familiar. ¿Por qué estas leyes no se llaman “Las leyes de la menstruación” o “Las leyes de las relaciones conyugales”? Porque la santidad del matrimonio y la relación de la pareja con Hashem , más todo el futuro de sus hijos, dependen de la pureza de marido y mujer.

La Guemará y el Zohar no escatiman palabras de alabanza al referirse a la enorme recompensa que ha de recibir la pareja que observe estas leyes. Además, si ellos se santifican y elevan la relación conyugal al nivel más elevado de pensamiento, habla y acto, se les asegura descendencia sana, tanto mental como físicamente hablando, de cuerpo, mente y alma fuertes y además bellos!

La lista de fantásticas promesas continúa.

¿Quién no necesita un sustento adecuado hoy en día?

Ganarse la vida con holgadez es algo que todos queremos. Citando al Zohar, Rabí Najman de Breslev enseña que el sustento del hombre le llega en virtud de su mujer, más que por su talento o su trabajo duro. Cuanto más espiritualmente pura es la pareja, más bendición Divina invoca la mujer y más aumenta el sustento familiar. Por lo tanto, para que la pareja alcance su potencial óptimo de ingresos, es aconsejable que aprovechen la riqueza que trae la pureza familiar, la cual incluye la inmersión periódica de la mujer en la mikve (baño ritual), entre otras leyes. Alguna gente no se siente cómoda con esta sugerencia, por lo general por prejuicios o por ignorancia, pero si la pareja tiene problemas financieros y todavía no observan las leyes de pureza familiar, entonces ni aunque se saquen la lotería van a resolver sus problemas.

Las dobles bendiciones de pureza y abundancia llegan gracias a la mikve. Hay quienes peinsan que se endeudaron debido a que hicieron una mala inversión. Sin embargo, las deudas también pueden ser resultado de la impureza ritual. Con la mikve, la familia va a poder obtener el sustento mucho más fácilmente. El Zohar enseña que la mikve contribuye directamente a un sustento adecuado.

Las leyes de pureza tienen otros tantos beneficios: una relación matrimonial muchísimo más cariñosa, duradera y significativa, un sustento mucho mejor, e hijos mucho más exitosos, especialmente si el marido se cuida de no mirar donde no debe y cuida su santidad personal. Es una bendición para toda la familia.

Yo personalmente sé de muchas parejas que fueron a consultar al Rabino Arush quejándose de sus hijos, de su sustento o de su Shalom bait (paz conyugal). Lo primero que él les dice es que estudien las leyes prácticas de pureza familiar y que empiecen a ponerlas en práctica.

Él siempre enfatiza la importancia de que la mujer vaya a la mikve una vez al mes. También les recomienda que reciten el Tikún Haklalí, que es la colección de diez Salmos que reveló Rabí Najman: 16, 32, 41, 42, 59, 77, 90, 105, 137, 150. Muchas parejas que no tienen hijos han hecho realidad su sueño con estos consejos.

La pureza familiar hace que la pareja siempre sea joven. Su matrimonio se renueva con mucho amor cada mes. La mikve es uno de los regalos más bellos que nos ha dado Dios. Tiene un poder mágico. Una vez que la mujer se sumerge, recibe una santidad enorme y un tremendo poder espiritual. Su alma invoca bendiciones Divinas. Todas estas bendiciones, y muchas más, están a disposición de todos aquellos que observan las leyes de pureza familiar.