Bajo vigilancia

A medida que se va volviendo cada vez más difícil ver a Hashem en esta era “moderna”, Él nos va enviando cada vez más inventos técnicos para darnos pistas.

3 Tiempo de lectura

David Ben Horin

Posteado en 15.03.21

 

A medida que se va volviendo cada vez más difícil ver a Hashem en esta era “moderna”, Él nos va enviando cada vez más inventos técnicos para darnos pistas. El teléfono introdujo la idea de que Él puede oírnos a miles de kilómetros de distancia. Durante el siglo XIX, las teorías científicas estaban causando estragos en la fe de la gente. Por aquella época, la gente no podía imaginarse un Oído Divino oyendo todo lo que sucede en este inmenso universo. Y entonces llegó este aparatito que te permite oír a una persona que está en el otro extremo del mundo.

La computadora demuestra el concepto de unidad. Solíamos pensar que la calculadora, la máquina de escribir, el teléfono, la radio, la televisión, el archivo y la cámara fotográfica eran todos artefactos distintos. Pero ahora vemos que un solo artefacto, como por ejemplo el Smartphone – teléfono inteligente-  que te cabe en la palma de la mano, incluye todo esto.

De repente, el concepto de que todo en Su universo puede fusionarse en Uno es algo real.

¿Qué aprendemos de los inventos más impactantes de nuestra generación: los motores de búsqueda y los medios sociales?

 

El grado en el que Hashem está observando.

 

¿Cuánta información poseen Google y Facebook de nosotros? La respuesta es pasmosa.

 

Una vez que te das cuenta de que todo lo que haces en Google y en Facebook, incluso las cosas que piensas que son privadas, de hecho están siendo guardadas y usadas por ellos, uno se da cuenta de la dura realidad:

 

De tu Calendario Google ellos ya saben todas tus citas, incluso las que cancelaste o borraste. Del Google Drive, tienen todos los documentos que alguna vez hayas creado, bajado, compartido o utilizado. Google es la propietaria de Youtube, así que cada vez que miraste un video de Youtube, ellos lo tienen registrado. Y cada vez que buscaste algo en Google usando su motor de búsqueda, ellos lo tienen registrado.

 

Facebook da un poco más de miedo…

 

 

Cuando bajas Facebook a tu teléfono, ellos te pueden ubicar en todo momento. Usando la tecnología de GPS y locación de mapas, ellos saben cuándo vas a buscar café, cuándo y dónde vas a almorzar, a qué bares vas, cuándo sales de casa y cuándo vuelves a casa.

 

Si alguna vez vas a algún lugar que no quieres que los demás sepan, Facebook sí lo sabe.

 

Cada vez que “te gusta” algo, ellos lo registran. Hasta tus mensajes privados están todos en su plataforma y ellos tienen el derecho legal de hacer lo que les venga en gana…

 

Se rumorea que incluso graban el micrófono de tu teléfono. Es muy posible que cada palabra que alguna vez dijiste en tu teléfono inteligente – smartphone – esté registrada en un servidor en Mleo Park, California, y que la estén ofreciendo por el precio indicado.

 

¿Qué nos enseña todo esto acerca de Hashem? Que Él tiene un Ojo que ve, un Oído que oye, y que todo lo que hacemos está anotado y bien documentado. Si todo esto puede hacerse aquí en la tierra, ciertamente puede hacerse en el Cielo.

 

Todo lo que hacemos queda registrado y almacenado. Y una vez que nuestro “documento está completo” y terminamos de tomar decisiones en este mundo, todo el documento, todo lo que alguna vez dijimos, oído, visto y hasta pensado, será recordado y revisado el Día del Juicio. Cosas que nadie en este mundo sabe serán presentadas ante la Corte Divina. Hashem, los grandes Sabios y tu abuela van a estar todos allí presentes.

 

Pero hay una diferencia fundamental.

 

A diferencia del internet, donde los documentos no pueden ni cambiarse ni borrarse, los documentos que archiva Hashem pueden ser editados y eliminados. Las empresas de hi tech nunca te dan las contraseñas de su base de datos, pero Hashem ni siquiera cierra la suya con llave.

 

Cada vez que así lo desees, Él te permite reescribir algunos de los capítulos más oscuros de tu vida y literalmente empezar todo de nuevo con una pizarra limpia. Puedes insertar muchos documentos buenos de mitzvot, de estudio de la Torá, de emuná, de buenas acciones, y mucho más. El arrepentimiento consiste en cambiar los documentos. La acción positiva añade nuevos documentos a Su disco.

 

Incluso si los titanes del internet no nos permiten cambiar nada, Hashem, el Dios que todo lo oye y todo lo ve nos deja recrear nuestras vidas, cambiar nuestro pasado y redirigir nuestro futuro poco a poco.

 

      

 

 

 

Escribe tu opinión!

1. Myriam

5/27/2018

Claro que si

Ya no es tan importante la tecnología, cuando aprendemos que el padre amado tiene control de todo. Los miedos van desapareciendo C

2. Myriam

5/27/2018

Ya no es tan importante la tecnología, cuando aprendemos que el padre amado tiene control de todo. Los miedos van desapareciendo C

Gracias por tu respuesta

El comentario será publicado tras su aprobación

Agrega tu comentario