Una boca feliz

Aquel que habla negativamente se transforma un imán que atrae todo lo negativo.

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Rabino Shalom Arush

Posteado en 15.03.21

 

Todo lo que nos pasa gira en torno al habla. El habla conecta a la gente y determina la calidad de la relación. La persona que busca perfeccionar su carácter debe tratar de aspirar a tener un habla impecable, absteniéndose de decir cosas negativas, ya que el habla refleja la esencia de la persona. Aquel que habla negativamente se transforma un imán que atrae todo lo negativo. Aquel que habla bien, por el contrario, se transforma en un canal de bendición. Dijo el Rey Salomón (Proverbios 18:21): “La muerte y la vida están en manos de la boca”. La boca puede o bien destruir o bien construir, iluminar el mundo o sumirlo en la oscuridad. La corrección del mundo depende de nosotros, de que lo construyamos y no lo destruyamos. Por eso, si alguien te humilló o te insultó, perdónalo, y de esa manera vivirás una vida más larga.

 

Dice el Zohar: “Las calumnias que la serpiente le dijo a Eva le causaron la muerte a ella, a Adán y a todas las generaciones subsiguientes”. La malvada serpiente habló calumnias de Hashem, como si Él hubiera sido avaro con ellos, por así decirlo, y por eso Él no quiso que comieran del Árbol del Conocimiento. Esta terrible frase arruinó el mundo para todas las generaciones subsiguientes.

 

Vemos esto con nuestros propios ojos en cada familia: la calidad de vida está basada en la calidad del habla de esa familia. La familia sana goza de una comunicación sana con palabras de alegría y emuná. En hebreo, las letras que conforman la palabra familia – mishpajá – son las mismas que forman la frase “boca feliz” – pe sameaj. Esta familia evita las críticas y los insultos, que causan un daño muchas veces irreparable. La familia feliz se mantiene alejada de las malas lenguas y los chismes, que es lo que destruye los matrimonios, las relaciones interpersonales y el mundo en general.

 

Nadie debe ignorar el hecho de que la boca es muy parecida al poder atómico: es muy peligrosa. Puede construir pero también puede destruir. Aquellos que asesinan a otros con sus palabras suelen encogerse de hombros en señal de falsa inocencia y preguntan: “Pero ¿qué hice al fin y al cabo? Solamente hice un comentario sin importancia…”. Eso fue lo que dijo la serpiente, cuyo veneno es símbolo del habla tóxica.

 

La persona sabia se cuida mucho de lo que dice, pensando antes de hablar de qué manera lo que va a decir va a afectar al que lo escucha, y va a hacer todo lo posible por evitar insultar o causar dolor al otro. Su forma de hablar siempre es melodiosa y agradable al oído. Dijo el Rey Salomón que las palabras de los sabios mejoran el estado de ánimo de las personas que los rodean.

 

El habla es la expresión del alma y la indicación de la esencia de la persona, y lo que dice la persona revela en gran medida cómo es ella. Por eso, debemos cuidarnos mucho de usar un habla refinada.

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1. Nusola_6308@hotmail.com

9/11/2018

2. Nusola_6308@hotmail.com

9/11/2018

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3. Cristina Calahorrano

8/24/2018

Gracias por el mensaje del habla Es una gran leccion para mi

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