Te falta una sola cosa

Yo siempre digo que es muy bueno repetir una y otra vez a lo largo de la vida que nosotros, al fin y al cabo, somos solamente “autoestopistas”

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Rabino Shalom Arush

Posteado en 06.11.22

Yo siempre digo que es muy bueno repetir una y otra vez a lo largo de la vida que nosotros, al fin y al cabo, somos solamente “autoestopistas” y “huéspedes”, que con enorme bondad fuimos invitados a la gran mesa del Creador del mundo y que hemos recibido de Él regalos inmensos de Su mano generosa, llena, rica y abierta.

El más grande regalo que hemos recibido es la vida misma. Y cada uno de nosotros tiene otros tantos regalos propios e individuales que le hizo el Creador – incluso un techo bajo el cual cobijarse, pan que comer, y ropa para vestir no son cosas que se puedan dar por sentadas, sino que son pura benevolencia y regalos inmerecidos. Y además de todo esto, Hashem nos da también esos diamantes tan preciados que son la Torá y las mitzvot. Después de todo esto, deberíamos sentir mucha vergüenza ante el Creador y una inmensa alegría y gratitud.

Yo siempre digo que es muy bueno repetir una y otra vez a lo largo de la vida que nosotros, al fin y al cabo, somos solamente “autoestopistas”

En vez de pasarnos todo el día pensando “qué cosas me faltan”, deberíamos pensar “cuánta gratitud Le debo al Creador por todo lo que me ha dado, por cada segundo de vida”. Deberíamos sentir a cada instante cuánta gratitud le debo al Creador y entender que tengo una sola deficiencia: ¡que todavía no Le he dado las gracias en medida suficiente!

Únicamente cuando sentimos esto, podemos hacerle un pedido al Creador. ¿Saben por qué? Porque el Creador es compasivo y nos dice a cada uno de nosotros: “¿Qué más quieres? ¡Solamente pídelo y Yo te lo daré! Más de lo que tú deseas recibir, Yo quiero darte y beneficiarte”. Esa es la esencia del Rey de Reyes, y ese es Su único anhelo. Cuando Hashem nos da, Su Nombre se agranda y se revela Su soberanía en el mundo. Pero solamente a condición de que realmente Le pidamos un regalo gratuito y no vengamos con “exigencias”.

Apenas uno comprende que nadie le debe nada, ahí es cuando empieza a pedir desde un lugar de vergüenza: sintiendo que no se lo merece y que todo lo que recibió hasta el día de hoy fue todo un regalo inmerecido, y que el solo hecho de poder pedir es un mérito que no se puede dar por sentado.

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1. Angelica

11/11/2022

Gracias BARUJ HASHEM por esta enseñanza, gracias a Rabino Arush y el grupo Breslev, que me han enseñado que tan importante es la gratitud, gracias HaShem por permitirme conocerte y saber qué eres El único Dios, el Dios de Abraham, Isac y Jacob. El Dios de Israel HASHEM uno es. Gracias HASHEM por todo lo que soy y todo lo qué tengo tu me lo das .

2. Cecilia Garcia Tijiboy

11/11/2022

Bendito sea Hashem. Gracias por todo, por mi vida, y porque tanto lo bueno como lo que yo pueda ver como malo,todo viene de ti. Gracias por enseñarme tanto. Amén

3. Esperanza

11/10/2022

Gracias Ashem te amo Rey del universo gracias. Mi pregunta es. Yo Voy al parque o en mi pieza rezo al todo poderoso però lloro inconteniblemente. Y le digo Rey del universo lloro no de tristeza es alegria porque tu Eres mi padre. Y El padre de NUESTROS antepasados,me siento muy orgullosa. Mi pregunta es estoy haciendo mal? Rab Ashem le bendiga

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