Cuando el “no” significa “sí”

¿Cuántas veces en la vida se nos dice que no, y al final nos encontramos con algo mucho mejor que la primera opción?

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David Ben Horin

Posteado en 01.05.22

Uno de mis amigos le propuso matrimonio a su novia. 

Ella le respondió que no. 

A él le dolió. Le costó recuperarse, pero lo logró. 

Finalmente conoció a una chica que era mejor para él. 

Cuando le pidió que se casara con él, ella le dijo que sí. 

Baruj Hashem, hoy son muy felices juntos. 

Cuando yo era niño, le pedí a mi padre que me diera más dinero de asignación semanal 

Me dijo que no. 

Le pregunté por qué, 

“David, usas el dinero que te doy cada semana solamente para comprar golosinas. Si te doy más dinero, vas a comprar más caramelos. ¿Qué te parece si pasas menos tiempo caminando al kiosco de golosinas y más tiempo corriendo alrededor de la manzana?”.

Siguiendo su consejo, empecé a correr alrededor de la manzana.  

Seis meses después, completé mi primera media maratón. 

¿Cuántas veces en la vida se nos dice que no, y al final nos encontramos con algo mucho mejor que la primera opción?

¿Cuántas veces Le pedimos algo a Hashem y Él nos dice que no? ¿Cuántas mitzvot en la Torá son un “no” de Hashem?

El sí más grande

No se nos permite trabajar en Shabat. 

Pero ¿qué sucede cuando se nos ocurre la idea perfecta en Shabat? 

Nuestro primer instinto es ir corriendo a la computadora y ver hasta dónde nos lleva nuestra idea. 

Entonces recordamos que Hashem nos dice que no. 

¿Es un no a trabajar en Shabat, o es un sí a traer más bendiciones en este mundo y en el Mundo Venidero al no trabajar en Shabat, y esforzarnos ante nuestro Creador apartando esas ideas de nuestra cabeza hasta más tarde?

No se nos permite cometer adulterio. 

¿Cuántas veces nos conectamos a Internet para ver el resultado del partido de la noche anterior y nos sorprendemos con un anuncio de la edición de trajes de baño del mes siguiente? 

Nuestro primer pensamiento es traicionar a nuestra familia a nuestros deseos. Luego recordamos que Dios dice no. 

¿Es un no al adulterio, o un sí a una vida de felicidad? ¿Es un sí a ser leales a nuestras esposas, a nuestros hijos, y al hacerlo cometer un acto de bondad? Darle a tu mujer una vida de paz interior, y a tus hijos, el entorno más estable para vivir y crecer, y ser felices, es un acto de bondad para toda la vida. 

Todas las mañanas al rezar, leemos una Mishná y una sección de la Guemará que hablan de los actos que podemos hacer en este mundo en los que recibimos bendición y recompensa tanto en este mundo como en el Otro. 

Tanto en la Mishná como en la Guemará que recitamos todos los días, los Sabios nos dicen que los actos de bondad nos traen la bendición de Hashem tanto en este mundo como en el Venidero. 

Dios le dice no a un placer superficial en este mundo para poder decirle sí a una vida y a una vida posterior de bendición. 

No se nos permite odiar a nuestro hermano en nuestro corazón. No se nos permite hablar mal de él delante de los demás, aunque la información sea cierta. Si fuimos agraviados, no se nos permite vengarnos. 

Todos estos “no” de hecho restringen muchas de nuestras actividades. Mantienen la ira y el resentimiento atrapados dentro del corazón. 

Sin embargo, al mismo tiempo, son las claves de un sí mayor. Sí, creemos que Hashem es el Verdadero Proveedor y que, independientemente de lo que se haya dicho de nosotros o de que sintamos que debemos “defendernos” desacreditando a alguien que puede presentarnos una amenaza, reforzamos nuestra fe en que lo que Hashem decreta que tengamos ahora, el hombre no puede retrasarlo, y lo que Él decreta que tengamos después, no podemos acelerarlo. 

Ninguna palabra puede cambiar el decreto de Hashem. Todos los días decimos en el rezo: “Bendito sea Aquel que habla y hace. Bendito sea Aquel que decreta y ejecuta Sus decretos”. 

Creemos que Hashem es el Verdadero Juez. Si nos equivocamos, Él lo arreglará. Si Él lo arreglará, entonces no tenemos que odiar a esa persona. Como una muestra de fe, podemos hacer todo lo posible por ser amables con ellos sólo para convertir nuestro resentimiento en amor infundado. 

Hacer la paz entre las personas es también una mitzvá que trae recompensa en este mundo y en el Próximo. 

Cada no que nos dice Hashem está ocultando un sí mucho más grande. 

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1. Noemy9621@hotmail.com

5/03/2022

Preciosas Palabras que Dan vida 💛. Bendiciones

2. Angel Rodriguez

5/01/2022

Increible justo las palabras que nesecitaba hoy!

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