¿Dónde estás? – Bereshit

Con ojos de emuná, nos damos cuenta de que todo lo que vemos, oímos y encontramos es un mensaje de Hashem que nos pide que nos evaluemos: “¿Dónde estás?”

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Rabino Shalom Arush

Posteado en 19.10.22

Pero al preguntarle dónde está, Hashem le está dando a Adán la oportunidad de detenerse, evaluarse a sí mismo y aclarar el punto de la verdad en su mente. Hashem ya conoce la respuesta…

Y Hashem Dios llamó al hombre y le dijo: “¿Dónde estás?” (Génesis 3: 9).

Nuestros sabios nos dicen que los Cinco Libros de Moisés están encapsulados en el Libro del Génesis o Bereshit. Aquí se presentan telegráficamente temas que se elaboran más adelante en la continuación de la Torá. Por ejemplo, la pregunta en hebreo de una sola palabra que Dios le hizo a Adán – ayeka, ¿dónde estás? – es la base de la conexión del hombre con Hashem.

Hashem, tal como nos dice el Midrash, sabía ciertamente dónde estaba Adán.

Pero al preguntarle dónde está, Hashem le está dando a Adán la oportunidad de detenerse, evaluarse a sí mismo y aclarar el punto de la verdad en su mente. Hashem ya conoce las respuestas, pero quiere que aclaremos la verdad para que también nosotros entendamos lo que está sucediendo en nuestras vidas. Hashem está aquí preguntándole a Adán: “¿Tu pecado fue un accidente, o tienes la intención de seguir pecando?”.

La respuesta de Adán es aparentemente extraña (ibid, 12): “Me dio del árbol, y comí”. ¿Qué clase de respuesta insolente es esa? ¿Acaso Adán es lo suficientemente descarado como para decirle a Hashem que pecó y que además seguirá pecando?

Ramatayim Tzofim, en su elaboración del Midrash, explica que Adán, la mismísima creación de las manos de Hashem, se disculpó ante Hashem y admitió que seguía siendo propenso a pecar en el futuro, pues aún no había hecho nada para refinarse. Escribe: “Esta es una lección importante para la persona, que debe ser consciente de sí misma, y no ser tan ignorante como para engañarse”. Este es un pensamiento muy profundo, especialmente porque muchas personas no pueden verse a sí mismas bajo una luz verdadera.

Vemos entonces que, aunque la respuesta de Adán a Hashem parece ser descarada, en realidad es digna de elogio, porque dijo la verdad y admitió su debilidad. Adán se evaluó a sí mismo correctamente y, por lo tanto, no se engañó. Tal autoevaluación sincera es gratificante para Hashem.

Después de cada contratiempo, pecado, ataque de ira, expresión de egoísmo, acto de mezquindad, egoísmo y cosas similares, Hashem nos hace la pregunta más incisiva: “¿Dónde estás?”. Vale decir, ¿a qué conclusión llegas con respecto a tu circunstancia actual? ¿Entiendes que eres vulnerable a tu mala inclinación y que está sacando lo mejor de ti? Hashem no sólo hace esta pregunta después de que experimentamos un contratiempo; nuestra alma Divina – una pequeña chispa de la bondad de Dios y nuestra fuerza vital – hace esta pregunta cada vez que debemos elegir entre opciones. Incluso cuando vemos u oímos hablar de alguien que hizo algo terrible, nuestra alma Divina grita desde dentro: “¿Crees que tú eres mejor? Pues deberías saber que podrías haber cometido el mismo error. ¿Acaso piensas que ya eres tan justo que estás por encima del pecado?”.

Con ojos de emuná, nos damos cuenta de que todo lo que vemos, oímos y encontramos es un mensaje de Hashem que nos pide que nos evaluemos: “¿Dónde estás?” Una vez que se da cuenta de lo peligrosa que es la mala inclinación, y de la facilidad con que el hombre es propenso a pecar, entonces puede tomar las precauciones necesarias. El soldado que subestima al enemigo acabará siendo sorprendido con la guardia baja.

Adán, como vimos anteriormente, no se engañó a sí mismo. Él sabía que era propenso a pecar de nuevo. En consecuencia, Adán se convirtió en el primer baal teshuva – penitente – del mundo, porque fue honesto con Hashem y consigo mismo.

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1. Angelica

10/27/2022

Gracias a HaShem, qué nos da la oportunidad de arrepentirnos, de nuestro pecados . Gracias grupo Breslev por sus buenas enseñanzas. Shalom

3. Jose Silva hijo de Odilia Rios

10/20/2022

Como hiciera para ser un noajida? Me gustaría tener un maestro de Isarael para ser un buen noajida. Muchas gracias. Ya ustedes me regalaron la Torá, pero si quiero tener un maestro. Veo todos los videos de Bfelesv.

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